viernes, 16 de marzo de 2012

"LAS ESPADAS DE LANKHMAR" de Fritz Leiber

LAS ESPADAS DE LANKHMAR


Autor: FRITZ LEIBER
Título original: THE SWORDS OF LANKHMAR
ISBN: 9788427013940
Género: Fantástico
Editorial: MARTÍNEZ ROCA
Fecha de publicación: 1968
Fecha de edición: 1990
Saga: FAFHR Y EL RATONERO GRÍS (5)


Sinopsis de la editorial:

Fafhrd y el Ratonero Gris son contratados para escoltar a la bella y elusiva hija de un mercader en un peligroso viaje por mar. El viaje es, evidentemente, de naturaleza algo accidentada... Los dos aventureros ven frustrados una y otra vez sus avances amorosos, se encuentran con un dragón marino dotado de un olfato finísimo, y atraviesan situaciones mucho más peligrosas de lo previsto. Y, entre una cosa y otra, ratas, muchas ratas, una verdadera invasión de ratas que llega a alcanzar dimensiones diabólicas, y un periplo alucinante a través de otro Lankhmar dentro de Lankhmar.

"Las espadas de Lankhmar" es la quinta entrega de la saga de Fafhrd y el Ratonero Gris y la única novela del ciclo. Está considerada, según la enciclopedia de Peter Nicholls, como la obra maestra del autor.

Acaparador de todos y cada uno de los grandes premios literarios que se conceden en la fantasía, la ciencia ficción y el terror, Fritz Leiber es uno de los escritores norteamericanos de estilo más personal y el autor más premiado en toda la historia de la literatura fantástica.


Jareht: RATAS POR DOQUIER

Después de haber leído las anteriores publicaciones del ciclo de ese par de célebres y celebrados  espadachines que son Fafhrd y el Ratonero Grís, le ha llegado el turno a ésta, su única novela.  Sus otras "novelas" no son en realidad tales sino un conjunto de relatos independientes, que tienen como nexo principal en común el tener como protagonistas a estos dos pícaros redomados, amantes de las mujeres, el vino, el juego y, en definitiva, la juerga en  muchas de sus variantes.

Si en "Espadas y demonios", "Espadas contra la muerte" y "Espadas entre la niebla" disfruté de las aventuras de este sin par dúo de bribones, en esta ocasión no ha sido menos. Puede que haya disfrutado incluso más. 

Para los entendidos, Fafhrd y el Ratonero Grís pasan por ser dentro del género fantástico dos referentes ineludibles. A la vista está que probablemente Fritz Leiber sea el escritor más premiado dentro de este tipo de literatura. ¿ Por qué ? Pues bien, entre otras cosas porque este par de simpáticos mercenarios, aparecidos a finales de los 60, vinieron a suponer la estruendosa y necesaria irrupción de eso que luego se llamó "antihéroes" en el género por antonomasia de las grandes figuras heroicas,  o sea, la literatura fantástica, de espada y brujería, o como quiera llamársela.  Y todo ello, unido a la calidad y entretenimiento de su propuesta,  le supuso éxito y una legión de incondicionales entre los que requerían de nuevas formulas y arquetipos para seguir enganchados a su género favorito.



El propio Leiber, al hablar de la génesis de su par de granujas, dice: "Tengo la impresión que Fafhrd  y el Ratonero Grís están  casi en el extremo opuesto a los héroes de Tolkien. Mi material es por lo menos tan fantástico como el suyo, pero es una clase de fantasía más terrena, con un fuerte aderezo de <<fantasía negra>>, o de humor negro, para utilizar la expresión actual de eso que antiguamente los ingleses llamaban <<humor de la horca>>." "Uno de los motivos iniciales  para la creación de personajes como Fafhrd y el Ratonero fue el deseo de concebir una pareja de héroes fantásticos  más próximos a la verdadera estatura humana que superhombres de Conan, Tarzán y tantos otros.  En cierta forma son una mezcla de Cabell y Eddison, si hemos de buscar antepasados literarios."

El hecho de que sus personajes y en definitiva su estilo se sitúe en las antípodas de Tolkien, como él mismo señala, no significa en absoluto que tengan que ser irreconciliables en los gustos del lector. Es decir, que uno puede disfrutar perfectamente de "El Señor de los Anillos" e incluso "El hobbit" y al tiempo pasárselo fenomenal con las tropelías de este par de buscavidas. Al menos ese es mí caso.




A diferencia de Tolkien, la obra de Leiber en España no ha tenido la difusión y el éxito que merecen, habiendo quedado relegada a ser una obra sobretodo conocida por los más entendidos  y  aficionados al género.  Signo de ello es que "Las espadas de Lankhmar" y las otras entregas del ciclo solamente se encuentran editadas ( que yo sepa ) en la colección Fantasy de la editorial Martínez Roca, a día de hoy descatalogada, habiéndose convertido en piezas de coleccionista  no precisamente baratas. 


Como curiosidad destaca que la obra de Leiber desembarca en esta maravillosa colección de la mano de su director, Alejo Cuervo. Muchos quizás no sepan quien es el tal Alejo, pero este hombre, que regentó presencialmente durante muchos años la tienda de literatura fantástica más especializada de Barcelona, de nombre Gigamesh,  también seleccionó para la colección Martinez Roca un montón de joyas del género fantástico. Una de estas joyas fue la obra que nos ocupa. Posteriormente, también crearía su propia línea editorial que, entre otros descubrimientos relevantes, publicó y  publica la mediática saga de Canción de Hielo y Fuego. Pues bien, Alejo Cuervo,  una persona con un innegable olfato para lo fantástico y un profundo conocedor del género, siempre ha sido un defensor a ultranza de Fritz Leiber.   En diversas ocasiones, incluso,  lo premió con el premio Gigamesh  por algunas de sus historias del norteño y el Ratonero. Por algo sería. 




El reconocimiento a nivel internacional, sobretodo inglés y americano, de la obra de Leiber ya es otro cantar. El propio Howard Chaykin ( Black Kiss, American Flagg, ...) decidió adaptar algunos de sus relatos del famoso dúo, junto con la ayuda del talentoso ilustrador Mike Mignola ( Hellboy y tantas cosas más ), con un éxito artístico indudable. Hoy día ese trabajo  se puede encontrar en una edición recopilatoria editada por Norma Editorial y que merece mucho la pena. 


Howard Chaykin, al hablar de su adaptación, tiene unas palabras como no, para la obra de Leiber y, en concreto, para "Las espadas de Lankhmar". Y dice lo siguiente: " La primera historia que leí de Fafhrd y Ratonero Gris fue <<Espadas de Lankhmar>>. Si no recuerdo mal, es la única novela completa en la que aparecen estos dos  -y me encantó - pero en aquel entonces dudo que hubiese podido articular el por qué, más allá de su locura innata, de la excentricidad de sus personajes, incidentes y puntos de vista." "Pero no fue hasta que releí <<Espadas de Lankhmar>> unos cuantos años después, que me di cuenta de que Leiber escribía <<Espada y Brujería>> para la gente a quién le gustaba la novela negra, la literatura criminal, y que Lankhmar, al fin y al cabo, sólo es un Manhattan ligeramente más fantástico que el real; o, al menos, que la ciudad al sur de la Calle 14, hacia 1935"


Pero dejando a un lado todo esto, " Las Espadas de Lankhmar" ofrece una de las más surreales, intrigantes y entretenidas historias que ha dado el género. Pocas veces un autor ha conseguido de forma tan sólida construir una historia que, vista  desde fuera y en la distancia, puede parecer totalmente delirante pero que cuando es leída cobra una dimensión desconocida.


Leiber ejemplifica perfectamente, de esta forma,  que las novelas no están hechas para ser contadas sino para ser leídas. 


"Las espadas de Lankhmar"  es una narración que  despliega poco a poco  sus encantos y hechizos de tal forma que uno se olvida de lo descabellado de su argumento para quedar atrapado en el fabuloso carrusel de aventuras y emociones que Leiber gobierna con pulso firme hasta el final. Sus ingredientes son muchos y variados: emoción, violencia, ternura, humor, intriga, lujuria; hasta el punto en que uno piensa que difícilmente se puede encontrar un plato de este tipo mejor condimentado. 


Leiber posee la capacidad de dar coherencia y solidez a la ficción más absolutamente desbocada. Su secreto probablemente radique en que es capaz de cargar sus historias y personajes con visos de realidad, madurez, y  sofisticación, que da pie a un cosmos personal que se encuentra lejos de la inocencia e ingenuidad que respiran muchas de las obras del género. 


Donde otros ofrecen grandes ideales, Leiber, ofrece grandes personajes. Donde otros ofrecen luz, Leiber, ofrece sombras. Donde otros ofrecen maniqueísmo, Leiber, ofrece la ambigüedad de la cruda realidad.


Por si fuera poco, la elegancia y el barroquismo de la prosa de Leiber lo elevan a una altura muy superior a la de otros de los escritores que pueblan el movedizo terreno de la fantasía. Con Leiber uno  tiene la sensación de estar leyendo a un autor que se ha dedicado a la novela fantástica pero que perfectamente se podría haber dedicado a otro tipo de literatura, de mayores vuelos o mayor reconocimiento. 


Uno de los aspectos más curiosos, fascinantes y excéntricos de la novela son los personajes femeninos. Nunca antes dos héroes de ficción, o antihéroes si se prefiere la terminología moderna, habían tenido   partenaires tan inusuales. Sin querer desvelar más sobre ellas, diré que el lector asiste en esta novela a  una atípica representación del amour fou más desaforado y sincero. Y lo hace por  partida doble. Serán muchos los que  se verán sorprendidos al encontrar en una novela de este género y de  1968 una  alusión tan clara, abierta, y progresista, al mestizaje y a la interracialidad. ¡ Para que luego muchos digan que la literatura fantástica tiene poca enjundia !


"Las espadas de Lankhmar" está revestida de una finura, de una agudeza, de un humor poco frecuente en el género, y que se ve aderezada por cantidad de escenas y situaciones que harán las delicias de los amantes de la aventura. 


Leiber consigue mantener en todo momento en vilo el interés del lector, incluso cuando separa a los dos amigos y diversifica los puntos de interés. 


Inolvidables son, por ejemplo, las andanzas del Ratonero Gris en la subterránea ciudad de las ratas, esas alimañas repulsivas y acechantes que son legión y que desde eras  han acompañado a las hombres en sus construcciones, ya sean barcos o ciudades, incluso cuando no se es consciente de ello. 


¡Ah! ¿ qué no os lo había dicho ? En esta novela hay ratas, ratas por doquier. 


Mi valoración: 8 ( sobre 10 )


Fritz Leiber 



4 comentarios:

  1. Siempre le he tenido ganas a esta saga... ¡pero no se reedita! Lo que sí tengo es el cómic que publicó Norma, pero aún pendiente de lectura.

    Saludos!

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    1. Sí, Jolan. Es una pena que no se reedite. Hace tiempo que se oye que Gigamesh está en ello, pero a la hora de la verdad no se acaba de hacer realidad. A mí me faltan dos de los siete, que seguramente adquiriré de segunda mano, por aquello de tenerlos todos en la misma edición. Me da que me costarán lo suyo.
      El cómic de Norma es bastante recomendable. La adaptación de Chaykin es muy buena y fiel, y del dibujo de Mike Mignola que te voy a contar que no sepas ya de sobras. ¡Ese hombre nunca falla!
      Ya me dirás que te parece el cómic cuando lo leas.

      Saludos desde dentro del laberinto.

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  2. Ahhh! A mi también me falta... 1! tengo 4 en libro y dos impresos bajados de internet...
    Bueno, a lo que iba:
    Sabes que los dos primeros personajes que salen en la primera novela de "Discworld" (El color de la magia) del genial Terry Pratchett son Fafhrd y el Ratonero gris? T.P. le hizo un pequeño homenaje al gran Leiber!

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    1. Gracias por visitar el blog, Miko-lynn!! Y gracias por participar en él con tus comentarios!!

      La verdad es que está complicado hacerse con los libros descatalogados de esta pareja de brivones espadachines, pero seguro que cuando los reediten los antiguos de Martínez Roca bajan de precio para nuestra fortuna. jeje

      Y sí, me hizo mucha gracia cuando leí por primera vez "El color de la magía" encontrar esa referencia tan divertida. De hecho, la leí ( y tengo ) en la antigua edición de Martínez Roca. Creo que se llamaban Vrad y Comadreja. Pratchett dejaba claro en sus inicios que además de una habilidad inusitada para el humor más desternillante y simpático también era un profundo conocedor de los clásicos de la Fantasy. Si no recuerdo mal también se parodia a Elric y su espada "Stormbringer", con esa espada tan pesada y metepatas que no deja de hablar. jeje

      Saludos desde dentro del laberinto.

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